El año pasado escribí sobre cuanto detestaba a las parejas estúpidas en San Valentín. Bueno, este año será un poco diferente. Será más personal que todas las demás publicaciones que he hecho. En un principio, porque es algo especial para mi y en segundo, porque nadie más aparte de mi lee este blog. Al menos de eso me he dado cuenta, así que no debería importar lo que publiqué o deje de publicar. Voy a publicar directamente lo que quiero escribir. Es demasiado cliché para el día de ayer, así que mejor lo escribí en 15, en realidad el día no me importa. Lo escribo porque así lo sentí y listo.
Estoy jodidamente enamorada.
Siempre pensé que nunca iba a conocer a alguien que correspondiera por completo todas las locuras que puedo hacer. Decir algo como "siempre me he entregado" sería una mentira. Yo daba más de lo que algunas personas se merecían pero nunca me he entregado por completo a una relación y posiblemente nunca lo haga. Pero, esta es la primera vez en la historia de mis relaciones que siento que va a funcionar y que sé que estoy siendo 100% correspondida. Él hace todo lo que puede y más por mi. Y yo siempre hago todo lo que imagino que puede hacerle feliz, sin contar los muchos detalles escritos o hablados que tenemos.
Hoy no tenía grandes planes. Ver películas con mi novio y solo eso. Mi regalo hacia él fue un poco cliché pero excesivamente detallado y ha sido el primer regalo que le he dado a alguien que no es de mi familia. Insisto, no había grandes planes. Pero, hablé mucho con él. Sobre tantas cosas que me hicieron reír y otras tantas que me hicieron llorar. Lo amo. Lo amo tanto como para decirle todas las cosas que le dije. Siempre quise disculparme por hacerle pasar un mal rato. Siempre quise disculparme con todos a los que hice pasar un mal rato mientras estaba insegura de mi relación anterior. Especialmente con él. Porque sé lo que es que te den alas y te las corten de forma brusca. Siempre quise disculparme porque aunque no sabía si podía ir tan enserio como yo, sabía que era cruel estar de esa forma con alguien cuando aun había otro habitando en tu corazón.
Desde que inicié mi relación con él, sentía que necesitaba redimir mis acciones o demostrar de alguna forma que lamentaba cuanto lo hice sufrir por mi rechazo. Hoy, finalmente, pude hablarlo de frente. Decirle todo lo que tenía en la cabeza desde hace tiempo. Lo mucho que lo sentía por hacerle sentir mal, porque él es de los pocos que sé que no lo merecían. Aun así, no puedo decir que me haya arrepentido de mis acciones, porque estoy segura y sigo segura de que si lo hubiera intentado no habría funcionado. El hecho de que funcione, es porque lo intentamos después, con más calma. Además, madure demasiado. Cuatro meses son suficientes para cambiar un poco a alguien, con un poco más de madurez, yo sabía que podría intentarlo. Pero, tampoco sabía si él quería intentarlo.
Aunque lastimé a alguien cuando empecé a salir con él... Lo cierto es que durante varias semanas después de cortar mi relación anterior y con más fuerza que desde que le rechacé, estuve pensando en que tanto había fracturado nuestra relación amistosa. Porque durante cuatro meses no hablamos en lo más mínimo y no me reclamo ni nada por haberle hecho daño. Fui una persona muy mala con todos, con él y con ella. Apenas ahora estoy perdonándome por ello. Hable de tantas cosas hoy, que siento que no necesitaba que me perdonaran o demostrar que lo quería y no solamente era porque había terminado una relación y estuviera en busca de afecto desesperada. No. En realidad, el motivo de mis acciones era porque me di cuenta de lo mucho que lo quería y lo muchísimo que deseaba que formara parte de mi vida. Da igual, él esta en una situación tan mala como la mía, el dinero no fue ni remotamente algo que me atrajo a él, fue más su forma de hacerme reír sin importar la situación y su amistad lo que de alguna forma me hizo pensar que es el indicado.
Y no sé si estoy escribiendo mucha cursilería, que posiblemente sea porque consumí mucha azúcar y eso hace que me ponga happy. O quizás es porque el sentimiento es tan grande que a veces tengo que sofocarlo un poco escribiendo, aunque no tengo ni idea de que escribo ahora. Se lo atribuyo al sueño. Ya no sé que palabra usar. En absoluto lo necesito, sé que puedo estar feliz si no lo veo un par de días, pero los días son mejores cuando él esta a mi lado. Por lo que cuando estoy con él es como si hubiera un arcoiris en el cielo y como si no hubiera nada que temer, porque aunque no lo necesito su presencia me da valor para hacer cosas que normalmente no haría. Él es fuerte en todas las cosas en las que yo no, y yo tengo fortalezas en lo que él se debilita. Hacemos una buena pareja, no por el físico, si no porque nos complementamos. Él no es algo cliché como mi otra mitad. Él simplemente es quien merece estar conmigo, él es increíble. INCLUSO CUANDO NO QUIERE CREERME.
Tu eres todo lo que quiero en mi vida, Aarón♥.
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